¿Les creemos o no?

Días antes del 9 de agosto un diario de la ahora por todos conocida Majuro, capital de las islas Marshall, publicó en su página 14 una pequeña nota de tres pescadores mexicanos que habían sido rescatados por un barco atunero. Horas después la Agencia EFE le daba la vuelta al mundo a esa nota porque no habían sido 3 sino 9 meses los que habían estado a la deriva!!! De ahí a la fecha, los nombres de Lucio Rendón, Jesús Eduardo Vidaña y Salvador Ordóñez son ya célebres al igual que su lanchita sin nombre.
Sin embargo, hay toda una madeja de dudas alrededor de esta increíble historia que tiene más méritos que Robinson Crusoe. Unas voces dicen que son narcos porque están más enteros que un adolescente luego de dormir unas horas bajo el sol en la playa tras una borrachera. Pero de dónde vienen esas teorías????
En los pueblos pesqueros cercanos a Culiacán, en las costas de Sinaloa, es un secreto a voces, dicen los periodistas sinaloenses, que todos los pescadores no viven de lo que sacan con sus redes. Sino que viven de los trabajos que le hacen a los narcos ya sea recogiendo los paquetes que arrojan las narcoavionetas o llevando combustible a las narcolanchas. Y lo mismo se rumora en las costas de Nayarit, en las de Oaxaca y en las de todo el país. Lo difícil es probarlo, claro está!
Lo que si tiene sentido para no creerles es lo que afirman los especialistas. Y no nos referimos a médicos o similares. Los especialistas, quién más podría saber del tema, son los cientos de pescadores que hay a lo largo y ancho de las costas de México.
En el puerto de Veracruz, está José Sanchez, un viejo pescador que no sabe vivir de otra actividad. Esto es lo que dice de sus colegas ahora famosos: "Aquí estuvo perdido un náufrago que estuvo nueve días, ya en el noveno día lo encontraron y ya andaba amarrado en la lancha, ya traía todos sus labios resecos y su piel se la come la sal con el sol... Y estuvo hospitalizado como 15 días cuando lo encontraron y eso fueron como nueve días nada mas... Nadie aguanta tanto tiempo, menos nueve meses"
En el puerto de Ensenada, el tiburonero Carlos manuel Orozco también opina: "Y en poquitos días, también se debilita uno no crea que no... tantos días no creo que haya quedado algunos días. La piel se quema por la brisa del mar y el sol, hay muchos factores que no se les mira a ellos, en los parpados y labios a ellos no se les miraba así"
Entonces debemos creerles a los tres pescadores su travesía o no???? Bien dicen que sólo podría ser un milagro y la verdad es que tampoco se les han visto las flores en el manto como a San Juan Diego.